¿Te acabas de iniciar en la aventura del desarrollo web y no sabes muy bien por dónde empezar? ¿Las palabras hosting y dominio, o las siglas SSL o VPS te parecen demasiado técnicas y enrevesadas?
En este post te explicaremos todo lo que necesitas saber para salir de dudas. ¡Sigue leyendo!
Qué es un hosting:
La palabra hosting, en inglés, significa alojamiento. ¿No crees que esto nos da una interesante pista sobre qué es un hosting?
Pero… ¿Para qué sirve?
Es un servicio de alojamiento para sitios web, donde se alojan los contenidos de una web concreta y el correo electrónico para que todo el mundo pueda acceder a ellos desde cualquier dispositivo que esté conectado a Internet, desde cualquier parte del mundo y a cualquier hora del día.
El contenido de tu web debe estar alojado en un servidor web. Y esta es precisamente la función del hosting.
Así, cada vez que alguien teclee el nombre del dominio de tu web en su navegador, este servidor le transferirá todos los archivos necesarios para que pueda acceder a ella.
¿Cuál es la diferencia entre un hosting y un dominio?
Si bien un hosting y un dominio son dos entidades interdependientes, no son exactamente lo mismo.
El primer concepto, es el espacio donde almacenamos la información de nuestra web, mientras que el dominio es la dirección de esta web en Internet.
¿Qué tipos de hosting existen?
Hosting compartido
El hosting compartido es el tipo de hosting más utilizado. En él, se comparte un mismo servidor físico con las cuentas de hosting de varios usuarios. Además, también se comparten recursos como la memoria RAM y la CPU, aunque los datos de cada uno de los clientes son privados.
Es la opción ideal para quienes se acaban de iniciar en el desarrollo web, como por ejemplo pequeños negocios, o para webs de uso personal, debido a que es el tipo de hosting más económico.
Hosting VPS
Contratar un hosting VPS («servidor privado virtual») es dar un pequeño paso más allá. Se parece al hosting compartido en el sentido de que varios sitios web comparten el mismo servidor físico, pero, en este caso, estos no comparten su espacio ni sus recursos.
El servidor físico se divide en varios compartimentos aislados, y cada uno de ellos es un VPS con sus propios recursos garantizados, como la RAM y la CPU asignada al servicio.
Servidores dedicados
Un hosting con servidor dedicado, como su nombre indica, ofrece un equipo físico completo a un solo sitio web. Todos los recursos se dedican y garantizan, pues, a un único cliente y no se comparte el servidor con ningún otro usuario.
Si bien es uno de los tipos de hosting más completos, también es de los más caros. Suelen usarse para sitios web con mucho tráfico.
Cloud hosting
El cloud hosting («alojamiento en la nube») es el tipo de hosting más avanzado. Se diferencia del resto en que usa una red de servidores físicos conectados entre sí (que pueden estar en distintos lugares del mundo) y que se comportan como si fuesen un enorme servidor muy potente cuyos recursos son ilimitados.
Este tipo de hosting ofrece una mayor adaptabilidad a las variaciones de demanda, especialmente a aquellas empresas cuyas necesidades son más inestables.
Otros tipos de hosting
Existen otros tipos de hosting de diferente nomenclatura según quién sea el proveedor del servicio, como hosting SSL, hosting WordPress, hosting SEO o hosting ecommerce. En realidad, la mayoría son hosting compartidos o VPS con alguna especificidad técnica que lo diferencia del resto y que tienen un nombre especial por motivos puramente comerciales.
¿En qué deberías fijarte a la hora de contratar un hosting si eres autónomo o pequeña empresa?
Certificado SSL
Para que la conexión entre el navegador y el servidor sea segura, es recomendable que el hosting que contrates incluya la instalación de un certificado SSL (Secure Socket Layer) en el servidor web, especialmente si tu página es de ecommerce y la información que se intercambia en ella es de carácter sensible, como contraseñas, datos de las tarjetas de crédito, direcciones…
Gracias a este certificado, los mensajes entre servidor y navegador intercambiarán la información de forma segura a través de unas llaves criptográficas únicas. Esto, además, generará confianza entre los visitantes de tu web, ya que es muy fácil identificar a simple vista cuándo una página dispone de un SSL.
Copias de seguridad diarias
Imagínate que borras algún dato crucial de tu web de forma errónea. Las copias de seguridad (o backup) serán tu salvación: gracias a ellas, podrás restaurar todo aquello que necesites: tanto archivos, como correos, como bases de datos. Estos se copiarán de forma periódica en el mismo servidor o en uno externo y tú mismo podrás acceder a ellos cuando lo necesites.
Posibilidad de creación de cuentas e-mails ilimitadas
Si contratas un hosting en el que se incluya la posibilidad de creación de cuentas de e-mail ilimitadas, podrás crear tantas cuentas de correo del tipo @tudominio.com como quieras.
Que todo tu equipo (en el caso de que seas una empresa) use un correo corporativo es ideal para garantizar la máxima seguridad y protección de tu información en las conversaciones que mantengas con tus clientes, proveedores o contactos. Esto también transmitirá más confianza y profesionalidad de cara al público.
Almacenamiento mínimo 2,5 GB o más para los contenidos de la Web y para los e-mails
La media de espacio requerido para alojar sitios pequeños es de 1 GB. No obstante, si tu proveedor te ofrece más de 2 GB de almacenamiento, podrás añadir a tu web tantas imágenes, textos y archivos como quieras para ir poco a poco mejorándola y completándola. Además, podrás almacenar todas las cuentas de e-mail hosting, las bases de datos y las aplicaciones web que necesites sin temer por una posible falta de espacio.
Sabiendo ya lo que es un hosting, ahora toca encontrar el mejor
Contratar un servicio de alojamiento Web es básico para que la página web de tu negocio tenga su propio lugar en Internet.
Tus potenciales clientes estarán a un solo clic (y, además, desde cualquier parte del mundo) de visitar y conocer tu empresa y su filosofía. Y las probabilidades de que ese clic se convierta en una posterior toma de contacto serán aún más altas si el contenido de tu web es atractivo y se ajusta a los intereses de tus visitantes.
Si ya tienes claro qué es un alojamiento web y has decidido contratar uno, pero aún no sabes por cuál decantarte, en esta web encontrarás un ranking de mejores hostings que te resultará muy útil.
Te dejamos también este ranking (en inglés), mucho más sintetizado, pero con otros datos de interés relacionados con el mundo del hosting.
